Nunca había subido a un
avión y tengo que confesar que en algunos momentos sentí miedo.
Llegamos a la República Dominicana al anochecer, y a la mañana siguiente dimos un paseo por la playa. Era increíble la paz que todo aquello transmitía, el agua estaba caliente, los pájaros cantaban, los jardineros limpiaban y nos saludaban cordialmente…yo me sentí en otro mundo.
El primer día lo dedicamos a descansar del viaje, tomar el sol, ver las instalaciones del hotel y asistir a una reunión donde nos explicaron los pormenores de cómo sacar partido a nuestra estancia.
Al día siguiente hicimos una excursión a la Romana en Los Altos del Chabón, donde hay una hermita preciosa, un río muy caudaloso y una vegetación paradisíaca. Mis sentidos se deleitaban con tanta maravilla paisajística. Subimos a una embarcación en la desembocadura de un río y navegamos el mar Caribe bordeando la costa hasta un lugar con poca profundidad. En el arrecife de coral nos sumergimos con gafas de bucear y aletas, y pudimos nadar con los peces de colores. Continuamos la travesía hasta llegar a una playa que emergía del mar, y fue muy emocionante encontrarnos rodeados de estrellas marinas que podíamos acariciar y sostener momentáneamente en nuestras manos. Era muy emocionante!
Otro día viajamos a la capital, Santo Domingo. En el trayecto por carretera nos cruzamos con grandes plantaciones de caña de azúcar, y visitamos unas cuevas naturales por debajo de las cuales pasaba el mar.
Llegamos a la República Dominicana al anochecer, y a la mañana siguiente dimos un paseo por la playa. Era increíble la paz que todo aquello transmitía, el agua estaba caliente, los pájaros cantaban, los jardineros limpiaban y nos saludaban cordialmente…yo me sentí en otro mundo.
El primer día lo dedicamos a descansar del viaje, tomar el sol, ver las instalaciones del hotel y asistir a una reunión donde nos explicaron los pormenores de cómo sacar partido a nuestra estancia.
Al día siguiente hicimos una excursión a la Romana en Los Altos del Chabón, donde hay una hermita preciosa, un río muy caudaloso y una vegetación paradisíaca. Mis sentidos se deleitaban con tanta maravilla paisajística. Subimos a una embarcación en la desembocadura de un río y navegamos el mar Caribe bordeando la costa hasta un lugar con poca profundidad. En el arrecife de coral nos sumergimos con gafas de bucear y aletas, y pudimos nadar con los peces de colores. Continuamos la travesía hasta llegar a una playa que emergía del mar, y fue muy emocionante encontrarnos rodeados de estrellas marinas que podíamos acariciar y sostener momentáneamente en nuestras manos. Era muy emocionante!
Otro día viajamos a la capital, Santo Domingo. En el trayecto por carretera nos cruzamos con grandes plantaciones de caña de azúcar, y visitamos unas cuevas naturales por debajo de las cuales pasaba el mar.
Ya en la ciudad visitamos
la casa de Colón, un monumento militar, la Catedral y en la calle más típica
para comprar suvenires, los vendedores nos acosaban como moscas a la miel.
Aunque su moneda es el peso, prefieren que les pagues en dólares.
También visitamos el centro del país, las plantaciones de caña de azúcar y arroz, los poblados y su gente, pudimos dar un paseo a caballo y probar la comida típica campesina. Regresamos al hotel en 4X4 y la aventura fue fascinante.
En el Hotel nos relajamos como nunca, playa, piscina, masajes, zumos y baile merengue. Toda la vida trabajando, un poco de confort nos sentó muy bien.
Este viaje me ha gustado tanto que si puedo volveré algún día.
También visitamos el centro del país, las plantaciones de caña de azúcar y arroz, los poblados y su gente, pudimos dar un paseo a caballo y probar la comida típica campesina. Regresamos al hotel en 4X4 y la aventura fue fascinante.
En el Hotel nos relajamos como nunca, playa, piscina, masajes, zumos y baile merengue. Toda la vida trabajando, un poco de confort nos sentó muy bien.
Este viaje me ha gustado tanto que si puedo volveré algún día.
CARMEN NUÑEZ
Esta muy bien explicado. Dan ganas de viajar y descubrir otros paises. Qué suerte, me alegro por ustedes
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ResponderEliminarUn viaje impresionante. Lo he vivido contigo!
ResponderEliminarYome e setido edintificada contigo llo tanpoco meesubido a un abion me siento como tu meagustado
ResponderEliminarse me olbido darte el voto
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarbien lo del viaje un desfrute a tope un voto
ResponderEliminarUn voto para ud.
ResponderEliminarMe has hecho viajar con tus palabras, se siente la ilusión y la satisfacción con la que disfrutaste de aquellos días.Cuanta magia nos proporcionan los viajes.
ResponderEliminarme a gustado tu relato porque parecia que estava alli. Le doy mi voto a esta ama de casa viajera
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